Actualmente hay en España unas trece mil fundaciones de las que solo ocho mil (el 61%) están activas y de éstas, no llegan a cinco mil las fundaciones con empleados (el 42% de las activas).
¿Quiénes las han creado? El 75% de las fundaciones las constituyen personas físicas. Solo una cuarta parte son creadas por personas jurídicas y de éstas el 66% son privadas (Asociaciones, otras fundaciones, mercantiles…) y un 34%, públicas (comunidades autónomas y la propia administración central).
¿A qué se dedican? Casi el 40% se enmarcan en los fines denominados culturales, desde la música al deporte. Un 22% a la educación y la investigación, un 10% al medio ambiente, un 9% a los servicios sociales y un 5% a fines sanitarios.
Las fundaciones en estos años de crisis han sido, lo están siendo, muy necesarias. Atienden las necesidades de determinados colectivos de una forma más cercana y eficiente de lo que podría hacer el sector público, pues o bien no tienen o no dan presupuesto, o bien por falta de capacidad de gestión.
Pensemos en África, América latina, India: los hospitales, centros sanitarios, de educación, de caridad que gestionan españoles y que financian empresas y personas desde aquí. La fundación Vicente Ferrer, por ejemplo. O en la de asociaciones y fundaciones que investigan enfermedades raras, como la Niemann Pick, o no tan raras como la leucemia con la fundación del tenor Carreras.
Para esto nacen las fundaciones, para hacer frente a tales necesidades y dar respuestas concretas a problemas sociales. Desarrollan sus programas y actividades, a veces de forma complementaria, otras de forma sustitutiva, otras de forma distinta y, en ocasiones, de forma única e insustituible, creando para ello estructuras organizativas adecuadas para alcanzar fines diversos demandados por la sociedad. Y suponen por tanto un gran ahorro para el Sector Público que no tiene así que atender, o hacerlo sólo parcialmente, las nuevas necesidades sociales. Por cierto, más del 80% de los recursos de las fundaciones provienen del sector privado.
Pero otro gran apartado son las fundaciones como traje jurídico más apropiado para actividades empresariales muy concretas: ¿alguien conoce universidades privadas, hospitales, residencias de ancianos, guarderías, centros sanitarios (desde el dentista al fisio), I+D, centros deportivos, actividades musicales, festivales, etc. que no sean fundación? Si las conoce solo cabe dos explicaciones: o bien es que no pagan nunca impuestos o bien es que no han tenido quien les aconsejara bien.
